Ahora en marzo comienzan las obras de construcción de las dos líneas aéreas que permitirán la conexión de las plantas fotovoltaicas (también en construcción) a la línea eléctrica Paranal en 23 kV. existente y que alimentarán el Observatorio ESO- Paranal, ubicado en el Desierto de Atacama.

 

Dos obras de líneas eléctricas aéreas, denominadas “Línea Eléctrica Paranal” y “Línea Eléctrica Armazones”, permitirán la conexión de dos Plantas Fotovoltaicas (PFV) que suministrarán parte de la energía eléctrica que abastece al Observatorio Europeo Austral (ESO), principal organización astronómica intergubernamental de Europa, que opera actualmente en el sector Cerro Paranal en el Desierto de Atacama.

Ahora en marzo comienzan la construcción de las dos líneas y se estima que el tiempo de trabajo será de 75 días aproximadamente, incluye el empalme y la puesta en servicio de las líneas. “Este tipo de obras es muy importante para nosotros porque estamos vinculados a un proyecto de sustentabilidad y energías limpias, es por ello que ya estamos preparados para comenzar con los trabajos de construcción de 1,4 kilómetros de línea lo más pronto posible”, comentó Patricio Saglie, Gerente Zonal de STN.

La experiencia, infraestructura y equipo humano de STN la ha transformado en un socio estratégico para grandes proyectos de la zona y para la industria minera, brindando servicios de ingeniería, construcción, operación y mantenimiento de sistemas eléctricos de potencia.

“Estamos muy satisfechos con el trabajo que hemos venido realizando durante el tiempo, porque nos ha diferenciado de nuestra competencia, ya que, además de ofrecer una oferta a la medida del cliente, tenemos la experiencia y el equipo de profesionales de primer nivel que se refleja en tiempo y calidad de construcción”, argumentó Saglie.

Esto se suma a la experiencia de construcción y mantención como Grupo Saesa en proyectos como Subestación Kapatur que abastece a Minera BHP Billiton-Escondida; construcción de Subestación Remehue, la primera subestación digital de Chile; y la Subestación Kimal donde también se participó en la construcción de nuevas líneas en los tramos Crucero – Chuquicamata y Salar, además de Crucero – Laberinto 1 y 2.